Cómo y dónde acariciar a un caballo

¿A quién no le gusta acariciar a un caballo? Siempre que vemos un equino sentimos deseos de acercarnos para acariciarle, pero muchas veces no sabemos dónde poner nuestra mano para evitar que el equino reaccione bruscamente y nos pueda llegar a hacer daño.

Como acariciar a un caballo

Si quieres que tu equino disfrute y se relaje mientras le acaricias, no te pierdas este artículo.

¿Cómo acariciar a un caballo?

Acariciar a un caballo no es tan fácil como parece. Para no asustar a tu caballo y evitar accidentes innecesarios es conveniente que sigas los siguientes pasos.

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Acercamiento

Antes de acariciar a un caballo debemos tener en cuenta que el acercamiento hacia él debe ser muy lento. Si hacemos algún movimiento brusco lo más probable es que el caballo se asuste y salga corriendo. También puede darse el caso de que nos suelte una coz e incluso un mordisco en defensa propia al vernos como una amenaza.

Presentación

Una vez que nos hemos acercado lentamente lo suficiente para llegar a tocar al caballo, el siguiente paso es dejar que el caballo nos huela. Le podemos enseñar nuestra mano, que vea que no vamos a herirle y que solo tenemos buenas intenciones.

Mediante el olor, al igual que los perros, el caballo nos identificará y poco a poco iremos ganándonos su confianza.

Primera toma de contacto

Llegamos a la parte que más nos interesa, acariciar al caballo. Una vez que el caballo ya nos ha reconocido mediante el olor, procedemos a acariciar a nuestro equino por la zona del cuello, que suele ser la zona que más le gusta.

Como y donde acariciar a un caballo.

Veamos cuáles son las zonas más placenteras para acariciar a un caballo.

¿Dónde acariciar a un caballo?

Cabeza

La cabeza es una de las zonas que más a mano nos queda y por ello muchas veces es la zona predilecta para acariciar a un caballo. Y a ellos les gusta. Acariciar a un caballo en la frente dibujando pequeños círculos muy lentamente puede ser la solución perfecta para caballos muy nerviosos o con estrés.

Otra de las zonas de la cabeza que produce bastante placer al acariciarla son las aproximaciones de las orejas. Al igual que en los perros, acariciar esta zona o incluso rascarla puede producirle mucho placer a nuestro caballo. Pero cuidado, si nuestro caballo no está acostumbrado a tener contacto en esta zona puede asustarse así que procede con cuidado y muy suavemente y observa su primera reacción.

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Cuello

El cuello es otra de las zonas que más a mano nos queda y a la que más solemos recurrir como primera toma de contacto con un caballo. En las crines, por ejemplo, los equinos sienten mucho placer cuando les acariciamos o rascamos. De hecho, muchos caballos restriegan sus cuellos entre ellos para darse placer e incluso para saludarse. Les ayuda a reforzar los vínculos sociales.

Espalda

La zona del dorso, donde se coloca la montura, es otra zona placentera donde podemos acariciar a nuestro caballo, sobre todo después de la monta y del cepillado.

La zona de la cruz es un sitio ideal dónde acariciar a un caballo para tranquilizarlo si se trata de un equino nervioso.

Pecho

Justo delante de las patas delanteras, en el pecho, se encuentra otra zona placentera donde podemos acariciar a un caballo. Se trata de un lugar de difícil acceso para el equino y agradecerá cualquier caricia ya que además es un sitio donde suelen sentir picores debido al sudor.

Vientre

¿Nunca habéis acariciado a un perro en el pecho? Seguro que sí. Pues habréis podido comprobar cómo se da la vuelta pidiéndonos más cosquillas por la zona. ¡Les encanta! Pues los caballos van por el mismo camino. En esta zona apenas les crece el pelo y los mosquitos aprovechan para picar a sus anchas. Si acariciamos o rascamos esta zona, ellos nos lo agradecerán.

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Nalgas

Las nalgas es otro de los sitios de difícil acceso para los caballos. Sin embargo muchas veces con ayuda de árboles se rascan como pueden. Nosotros también podemos ayudarles y rascarles o acariciarles por esta zona.

Pero ¡cuidado! Si nos ponemos detrás de ellos y se ponen nerviosos pueden soltarnos una coz aunque el caballo ya nos conozca, asique mucho cuidado con la zona de los muslos traseros y las nalgas.

Falsos mitos sobre acariciar caballos

Muchos de nosotros estamos acostumbrados a acariciar a los caballos con palmadas pensando que les gusta. ¡Error!

A los caballos no les gusta que le demos palmaditas al igual que a nosotros tampoco nos gusta ¿verdad? Estudios científicos han demostrado que los caballos que son acariciados suavemente y de forma circular obedecen mejor a sus cuidadores. Además, se relajan y disfrutan más de las caricias que a los que se les da palmadas.

Estiramientos en caballos

Para cualquier deportista realizar estiramientos es algo vital antes y después del entrenamiento. Los caballos necesitan también esta preparación previa y tras el ejercicio para mejorar sus condiciones de movilidad y elasticidad, incrementando con ello su rendimiento y limitando los problemas articulares y de agujetas asociados al peso extra del jinete.

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Ningún deportista plantea un entrenamiento sin estiramientos. Pero con los caballos esto no siempre ocurre, especialmente en los que no se dedican a la alta competición y no disponen de fisioterapeutas que vigilen y controlen su estado físico.

En los caballos los estiramientos son de vital importancia por varias razones. La primera es que ayudan a mejorar la movilidad de las articulaciones, incrementando con ello el rendimiento del animal y, por otro lado, aumentan la elasticidad y elongación de los músculos reduciendo las frecuentes lesiones en los tendones, un tejido poco elástico que une los músculos a los huesos.

Además, los estiramientos sirven para incrementar el bienestar de los caballos al reducir los espasmos musculares que suelen producirse tras el ejercicio, disminuyendo el dolor y las agujetas.

Debemos tener en cuenta que,aunque los caballos tienen una gran fuerza, durante los ejercicios de equitación son obligados a hacer movimientos que no suelen hacer de forma natural con el peso del jinete encima.

Cómo y cuándo realizar estiramientos con nuestro caballo

Los estiramientos se pueden realizar antes -si se hace previamente un buen calentamiento- y después del ejercicio. Los más importantes son los que se realizan después, una vez el cuerpo ha trabajado. Es muy importante hacerlos en los siguientes minutos tras terminar la sesión para evitar que la musculatura se enfríe.

ayudando a caballo a estirar

Existen dos tipos de estiramientos: activos y pasivos. Los estiramientos activos son aquellos en los que el caballo participa y hace todo el esfuerzo, por lo que el límite lo pone el propio animal. Suelen usarse premios para guiar los movimientos y la postura.

Los estiramientos pasivos son aquellos donde nosotros movilizamos las distintas partes del animal o estimulamos puntos para que el animal se mueva, por lo que hay un contacto directo con él. Debemos tener especial precaución de no forzar el estiramiento y si el animal se resiste es mejor soltarle e intentarlo unos minutos después.

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El estiramiento debe hacerse hasta un punto donde exista cierta tensión pero no se produzca dolor, siendo especialmente cuidadosos con los caballos nuevos. Una vez alcanzada la posición la mantendremos unos 20-30 segundos, tratando siempre de mantener nosotros una postura correcta que evite que nuestra espalda sufra.

los caballos necesitan también hacer estiramientos

Estiramientos pasivos del caballo

  • Estiramiento en protracción: Se trata de un estiramiento donde la extremidad, delantera o trasera, se lleva hacia delante y hacia el suelo, siempre en paralelo con el animal. Hay que iniciarlo movilizando suavemente las articulaciones con flexiones y extensiones suaves. Posteriormente se realiza el estiramiento, que puede hacerse más separado del suelo según el caballo vaya ganando flexibilidad. Este estiramiento permite trabajar los tendones y músculos flexores del antebrazo y del casco, el tríceps, el trapecio, el bíceps femoral o el glúteo, entre otros.
  • Estiramiento en retracción: Consiste en el estiramiento de los miembros llevándolos hacia atrás, con el casco apuntando hacia el suelo en paralelo con el animal y sin elevarlo demasiado. Este ejercicio permite trabajar los tendones y músculos extensores del casco, el bíceps braquial, el supraespinoso, el cuádriceps o el músculo tensor de la fascia lata, entre otros.
  • Estiramiento en abducción/aducción: Consiste en desplazar las extremidades hacia fuera o hacia dentro, es decir, alejándolas o acercándolas a la extremidad del otro lado. Los ejercicios de aducción pueden hacerse también aprovechando los de protracción y retracción, llevando la pata hacia la contralateral. Por ejemplo, si estamos trabajando la pata derecha la llevaremos hacia la mano izquierda. Esto permite movilizar la articulación coxofemoral y estirar la musculatura de la grupa.
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  • Estiramiento en circunlocución: Consiste en hacer círculos con las extremidades en un sentido y en otro. Permite movilizar las articulaciones y musculatura de la parte alta de las patas. Es importante no hacer movimientos exagerados para no forzar los tejidos y realizar los movimientos de forma suave.
  • Flexión del dorso: Con este ejercicio forzamos al caballo a estirar la musculatura de esta zona, previniendo la rigidez. Para hacerlo debemos localizar la línea alba, que recorre el vientre del caballo de delante a atrás. Una vez localizada iremos haciendo presión a lo largo de ella para que el animal se contraiga y se eleve.
  • Flexión y lateroflexión lumbosacra: Permite estirar toda la musculatura lumbar. Para ello nos colocamos detrás del caballo y presionamos mientras descendemos con los dedos a ambos lados de la cola. Para la lateroflexión colocaremos una mano igual que la anterior y la otra delante de la cadera contraria, alternando las presiones con suavidad y logrando una mayor movilidad.

Estiramientos activos para caballo

Se trata de movimientos que realizará el propio caballo. Son muy seguros ya que es el propio caballo el que los realiza. Aunque en un principio pueden resultar complicados, especialmente en caballos desconfiados, una vez los aprenden los aceptan bien y suelen realizarlos con soltura.

caballo estirando

El primero es la flexión de cuello y dorso, para lo que haremos que el caballo baje la cabeza y la meta entre sus patas delanteras todo lo posible. El segundo es la extensión de cuello y nuca, colocando un premio lo más lejos posible para que el animal lo alcance sin desplazarse, estirando para ello su cuello y su cabeza. El tercero es la lateroflexión del cuello, donde sin mover el cuerpo el caballo debe alcanzar un premio colocado a sus costados, doblando su cuello a derecha e izquierda.

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¿Cuál es el dorso de un caballo?

La espalda (dorso) es un punto débil en la anatomía de los caballos, por lo que un buen régimen de entrenamientos les proporcionará la fuerza suficiente para soportar el peso del jinete sin que ello suponga riesgo de sufrir sobreesfuerzos o lesiones. Esto se consigue con la denominada “reunión” del caballo, además de con sesiones de ejercicios pie a tierra que ayuden a fortalecer el “core”.

En el cuerpo de los caballos el dorso (espalda) tiene una importancia vital, ya que comunica los miembros posteriores con los anteriores y es la vía por la que se transmite la energía para lograr el movimiento. Además, el dorso es la zona que carga con el peso del jinete y que debe soportar la presión de este al apoyarse sobre la montura.

dorso de un caballo

A pesar de lo que pueda pensarse el dorso es un punto débil. La estructura ósea está formada por las vértebras torácicas y lumbares, las costillas y el esternón y esto provoca que, para evitar que se dañe la columna que protege la médula espinal, la musculatura deba desarrollarse para tener una gran resistencia.

Esta musculatura encargada de mantener alineada la columna se denomina “core” y está formada por músculos estrechamente relacionados con otros situados en el abdomen y que dan la fuerza y elasticidad suficientes para permitir una posición adecuada durante el movimiento del animal.

Por otro lado, esta musculatura es la encargada de que la espalda no se hunda cuando el equino lleva encima a su jinete y requiere de un entrenamiento para que esté en buena forma.

¿Cómo mejorar el dorso de un caballo?

Aunque en muchas ocasiones el trabajo del caballo está centrado en la elasticidad y potencia de las extremidades para lograr, por ejemplo, mayor altura en los saltos o mayor elevación de las manos en determinados ejercicios de doma, la realidad es que la parte más importante a trabajar para un rendimiento óptimo y una larga carrera deportiva es el dorso y los músculos del “core”.

Esto se debe a que el animal debe aprender a meter sus extremidades posteriores por debajo de su cuerpo a la hora de impulsarse, de forma que su espalda se redondee y su cabeza baje. Sólo con esta posición, que se denomina “reunión”, la espalda del caballo es capaz de soportar el peso del jinete sin dañar la columna, logrando la soltura de movimientos que lleven a lograr ejercicios de altísima dificultad.

muscular el dorso de un caballo

Cuando el dorso no se encuentra correctamente trabajado el animal tiende a hundir su espalda ante el peso sobre la silla, lo que genera roces entre las apófisis espinosas de las vértebras, la cresta que tienen en la parte más alta, apareciendo pinzamientos.

Esto genera en los caballos una enorme molestia, provocando tensión en toda la musculatura y que se fuercen las extremidades, aumentando el riesgo de sufrir daños graves en esta zona.

Además, para compensar la posición anómala de la columna las extremidades tienden a trabajar en sobreextensión y forzadas, cargando más peso sobre los miembros anteriores. A medio plazo esta circunstancia aumenta el riesgo de lesiones en tendones y músculos de las patas y reduce enormemente la capacidad de movimientos y la soltura de los mismos.

También hay que tener en cuenta que los caballos, como presas que son, tienden a ocultar el dolor y las lesiones de forma instintiva. Esto hace que los daños vayan a más sin presentar síntomas y que cuando se detecten sea tarde.

De hecho en muchos casos este dolor crónico se detecta por cambios durante la monta (cojeras, desequilibrios, etc),pero también por cambios de carácter, agresividad, reactividad o rechazo al jinete o la montura.

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¿Cómo hacer que mi caballo se ponga musculoso?

Aunque todos los aficionados disfrutamos a lomos de nuestros caballos, para una buena salud de nuestro animal es imprescindible realizar un buen trabajo pie a tierra. Por un lado tenemos el trabajo de paseo con el ramal sobre distintos tipos de terreno, aprovechando las cuestas para fortalecer y mejorar el equilibrio.

Por otro lado, el trabajo a la cuerda en pista está muy indicado para todo tipo de caballos, no sólo potros, ya que las transiciones crecientes y decrecientes ayudan a activar el dorso y mejorar la impulsión. Pueden hacerse en círculos o en rectas, con terreno llano o con cierta pendiente, para trabajar todos los grupos musculares.

En este trabajo pie a tierra podemos ayudarnos de las barras de tranqueo para trabajar el ritmo, la rectitud y la propiocepción. Se puede trabajar a paso inicialmente para después pasar a “aires” superiores (trote y galope).

Las barras deben colocarse a una distancia adecuada para que el caballo pueda pasarlas con seguridad y sin tropezar, lo que suele ser 1 metro al paso, 1,5 metros al trote y unos 3 metros al galope.

caballo musculoso

Estos ejercicios fortalecen los músculos del abdomen y dorso y pueden hacerse en recto o en círculos. Estos últimos permiten trabajar la incurvación y la flexibilidad del dorso.

Finalmente, pueden hacerse figuras más complejas como ochos o serpentinas, haciendo transiciones durante las mismas para alargar y acortar el dorso y lograr flexibilizarlo longitudinalmente.

Mencionar que para los trabajos de musculación de dorso contamos también con herramientas como el “pessoa”, que favorece una correcta posición de la cabeza y logra tonificar el dorso y mejorar la impulsión o las “bungee bands”, unas cintas elásticas que se colocan por el abdomen y tras las patas para contraer el abdomen y fomentar que el caballo remeta los pies sin necesidad de bloquear el tercio anterior como sucede con el primer método.

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2 comentarios

  1. Hola buenas. Consulto por sobre las caricias al caballo si entre las carias ¿estaría bien tocar y caricias en el bulto del caballo varón? osea en donde guarda el pene.

  2. Puede estar en proceso de involución,hoy en día la especie equina.

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