Las 5 mejores rutas para montar a caballo en España

Montar a caballo es para muchos más que un hobby. En España, se trata de una actividad cada vez más practicada y para la que buscamos rutas memorables que disfrutar junto a este animal.

La equitación está de moda y cada vez son más los aficionados que la practican en nuestro país. Montar a lomos de un caballo, pese a no resultar nada sencillo, se ha convertido en una actividad bastante recurrente tanto por aquellos amantes de este mundo como por otros que simplemente buscan desconectar.

Y qué mejor que relajarse recorriendo caminos inolvidables y de gran belleza, que nos aporten tanto paz y tranquilidad como diversión y entretenimiento. Pero para hacer turismo con garantías es imprescindible que cuentes en tu poder con el mejor catálogo posible de rutas que te sugerimos a continuación (el orden no es relevante, todas son igual de interesantes y recomendables) para ir acompañado de tu animal.

Para verano o invierno. Para tus vacaciones o algún puente o fin de semana que lo desees.

El mes o la estación no importan. Cualquier época del año que elijas, según tus intereses o como mejor te convenga, es perfectamente válida. Sólo tienes que planificar con criterio y saber si tu caballo está disponible y preparado para llevar a cabo dicha ruta. Y disfrutar.

¿Cuáles son las mejores rutas para montar a caballo?

1. Camí de Cavalls (Menorca)

El caballo es una figura indispensable en esta isla del archipiélago Balear. Menorca ofrece numerosos caminos espectaculares para deleitarse a lomos de uno de los animales más importantes de la zona.

Y la ruta más destaca para disfrutar de él es la denominada Camí de Cavalls.

Se trata de un camino de más de un centenar de kilómetros que recorre toda la costa menorquina y que puedes completar en unos cinco días. En ellos podrás deleitarte de las espectaculares playas vírgenes de esta isla gracias a este sendero histórico.

Además, te otorga la oportunidad de visitar lugares como el yacimiento arqueológico de Sanicera, el faro de Caballería con acantilados de más de 80 metros de altura o el Parque Natural de S’Albufera des Grau, entre otros espacios de interés.

El Camí de Cavalls cuenta con mucha historia a sus espaldas, ya que es un sendero que fue utilizado para defender la costa isleña cuando alrededor de 1330 el rey Jaume II estableció a los colonos la obligación de mantener un caballo armado para así defender Menorca y vigilar la costa balear.

Desde el siglo XVIII, el camino ha servido como servidumbre de paso hasta que en 1996 fue reabierto para que, en 2010, ya se inaugurara como camino público y como una de las rutas de Gran Recorrido en Europa.

2. Valls del Montcau (Barcelona)

Uno de los parajes naturales de más belleza en Cataluña. Allí podremos disfrutar de la vista de encinas y de bosques de pinos blancos y rojos. Pero no sólo con la bella naturaleza nos encontraremos a lomos de nuestro caballo.

También con arte arquitectónico como el que nos regala el Monasterio de Sant Benet en el Plam de Bages o el castillo de Talamanca.

Esta ruta, de aproximadamente tres días (unos 57 kilómetros), atraviesa les Valls del Montcau. Y también contiene otras paradas destacadas, como el pueblo medieval de Mura o el puente gótico de Vilomara, situado sobre el río Llobregat.

Una manera de conocer los parajes naturales y la abrupta naturaleza que envuelven la ciudad de Barcelona y que forman un pulmón verde lleno de escenarios idílicos que presenciar montado a caballo, como Montserrat en el horizonte.

3. Ruta del agua y la encina (Badajoz)

Si escoges la opción pacense, atravesando la Ruta del agua y la encina recorrerás aproximadamente 53 kilómetros en los que podrás encontrar desde reconocidos asentamientos visigodos y celtas hasta un histórico puente romano.

El camino se desarrolla en Burguillos del Cerro y sus alrededores y, además de transcurrir cerca de lugares con historia, la idea de dar un paseo por la cañada con visita a la majada, el lugar de refugio para los pastores y su ganado, también resulta muy atractiva.

Por lo demás, espacios verdes, abundante fauna salvaje, senderos y ríos unidos a los vestigios culturales nos permiten, en pleno siglo XXI, disfrutar con vivencias ancestrales únicas.

4. Ruta de la Moraña (Ávila)

Casi 80 kilómetros a lomos de tu caballo para recorrer la desconocida zona de “La Moraña” en la provincia de Ávila durante durante tres días y dos noches. Se trata de un camino que nos sumerge en La Moraña, tierra sembrada de pequeños pueblos históricos donde predomina el arte mudéjar.

No podrás perderte tanto el castillo de Arévalo como la Ermita del Cristo de los Pinares y la iglesia de La Lugareña. Y atravesarás un paisaje de pinos y alamedas y un refugio de aves esteparias siguiendo el curso del río Adaja.

Sus poblaciones más relevantes son Arévalo y Madrigal de las Altas Torres, en las que resulta obligado disfrutar de su paisaje de cereal, pinos y alamedas, bañado por pequeños ríos y lagunas donde un gran número de aves esteparias se cobijan. Esta zona está declarada como zona de especial protección para las aves (ZEPA).

5. Ruta de la Serena (Badajoz)

De vuelta a Extremadura. Esta vez a través de la Ruta Ecuestre de las Dehesas y Estepas de la Serena descubriremos los fascinantes parajes de la comarca de La Serena, tierra que se distingue por sus paisajes, su naturaleza, la historia o su gastronomía.

Con nuestro recorrido a caballo, que comienza y termina en Castuela a lo largo de tres días, tendremos la oportunidad de presenciar la inmensidad de la estepa o las maravillosas sierras del monte mediterráneo.

Durante la ruta, podremos visitar lugares como el Museo del turrón y el Centro de Interpretación de la naturaleza de La Serena.

En la primera jornada, visitaremos el barrio histórico del Cerrillo, antes de dirigirnos a las dehesas del Bercial a través del camino Mozárabe a Santiago.

La próxima parada será la de Puerto Mejoral, donde presenciaremos el gran castillo Almohade, en la localidad de Benquerencia de la Serena.

De camino a Castuera, pasaremos por los parajes de las cuevas de las Calderetas, con pinturas rupestres, y por el Puerto Ancho, lleno de curiosas construcciones pastoriles. De camino al centro ecuestre, conoceremos también vestigios de la Guerra Civil.

Otros lugares imprescindibles para montar a caballo

Además de las rutas más conocidas para montar a caballo, España tiene incontables lugares que merecen la pena visitar y recorrer a lomos de nuestro fiel animal.

Algunas de estas rutas poseen además el añadido icónico y simbólico al tratarse de destinos históricos, sin duda de gran relevancia además a nivel turístico.

Si hablamos de lugares llenos de simbología e historia, no pueden faltar nombres como el Camino de Santiago, una de las rutas de peregrinación más transitadas del mundo.

En algunas de las rutas para llegar a Santiago de Compostela, el caballo puede ser nuestro perfecto compañero de viaje.

Al igual que Santiago, los Pirineos también son un destino ideal por el que decidirnos visitar a lomos de nuestro caballo.

En la cordillera pirenaica se encuentra el Parque Nacional de los Pirineos, donde nos será imposible no disfrutar de la naturaleza y las montañas a través de rutas de varios días.

Y si hablamos de montaña, cómo no mencionar a la Sierra de Gredos, en la zona sur de Ávila.

Un lugar muy bien situado para los que viven en la ciudad y que cualquier fin de semana que lo deseen puedan escaparse del ‘estrés’ cotidiano de la capital.

Sin movernos de Castilla y León, otra provincia a la que no podemos faltar es Burgos.

Desde el pueblo de Covarrubias parten numerosas rutas a caballo en las que podrás contemplar animales como el águila real y el buitre leonado, y desfiladeros como los de la Estacada y La Yecla.

El cañón del río Lobos y la antigua ermita de Arganza también destacan como espacios de interés durante el recorrido.

Del norte de la península marchamos al sur.

Andalucía dispone tanto de montaña como de playa y las rutas son innumerables.

Desde elegir pasear con tu caballo por Sierra Nevada hasta decantarte por temperaturas más elevadas y realizar un recorrido bien planeado por El Rocío (Huelva) o la playa de la Barrosa (Cádiz), siempre actuando con precaución y controlando como es debido las horas de sol. De esta forma el disfrute estará asegurado.

¿Cómo hacer rutas a caballo? 5 consejos básicos

Si este próximo verano queremos disfrutar a tope de una ruta a caballo, antes deberemos tener en cuenta algunos consejos que nos serán muy útiles. Es necesario escoger bien el centro ecuestre, porque es importante que cuente con guías cualificados, equipamientos y seguros; el itinerario a realizar, los caballos que vamos a montar, la ropa que llevaremos durante la jornada y, finalmente, la hora del día en función de cómo apriete el calor en cada momento.

Al llegar las vacaciones son muchos los amantes de los caballos que aprovechan su tiempo de ocio para realizar alguna actividad ecuestre. En nuestro país existen cientos de centros que ofrecen rutas a caballo diseñadas para jinetes de todos los niveles y que son una divertida experiencia que nos permite disfrutar de los caballos y de la naturaleza.

Para evitarnos problemas con este tipo de rutas, aquí van cinco consejos a tener en cuenta cuando buscamos una actividad ecuestre de este tipo.

Escoge bien el centro ecuestre

En España existen cientos de centros ecuestres y la mayor parte cumplen con la normativa y cuidado de los caballos, sin embargo no está de más echar un vistazo previo a las instalaciones para asegurarnos de que los animales están en buenas condiciones por su seguridad y la nuestra.

Por otro lado, debemos optar por un centro registrado que cuente con las licencias autonómicas correspondientes. No olvidemos que la equitación conlleva cierto riesgo, por lo que la instalación debe disponer de un seguro de responsabilidad civil que cubra a los participantes durante la ruta, instalaciones y equipamientos adecuados y seguros para desarrollarla y monitores o guías cualificados que sepan actuar en caso de una emergencia y que nos ayuden a disfrutar al máximo de este maravilloso deporte.

Escoge bien la ruta

Actualmente la oferta de rutas a caballo es muy amplia y es importante ser conscientes de nuestras posibilidades reales a caballo y no decantarnos por una actividad por encima de nuestras posibilidades.

Como las rutas se suelen organizar en grupo es aconsejable elegir una acorde a la persona con menos nivel, ya que si optamos por salidas de mayor dificultad podemos poner en peligro a alguno de los miembros del grupo o que algunas personas no disfruten del paseo.

Escoge bien el caballo

Cuando se acude a un centro con licencia nos aseguramos de que los caballos son ejemplares bien domados, tranquilos y aptos para todos los públicos.

Los caballos con temperamentos algo más fuertes son entregados a jinetes con más experiencia. A su vez los ejemplares de mayor alzada o de complexión física más fuerte se repartirán en función de las características de cada persona.

Es importante huir de particulares que ofrecen sus propios caballos para dar paseos. Aunque la mayor parte de ellos pueden ser adecuados para casi todos los jinetes, podemos encontrarnos con ejemplares asustadizos o imprevisibles que acaben provocando algún incidente, especialmente con los participantes menos experimentados.

Escoge bien la ropa

Cuando vamos a realizar una ruta a caballo los centros ecuestres deben proporcionarnos el material de seguridad obligatorio, como es el caso del casco y el chaleco lumbar.

A partir de ahí nuestra obligación será escoger una vestimenta cómoda que nos evite lesiones tan típicas como roces o hematomas. Lo aconsejable para estar cómodos encima del caballo es utilizar unos pantalones elásticos, sin costuras gruesas y lo más ajustados posible, una camiseta fresca y transpirable y un calzado estrecho y de suela plana.

Escoge bien el momento

Aunque es en verano cuando tenemos más tiempo libre para realizar actividades de ocio como las rutas a caballo, hay que plantearse si la climatología es la adecuada antes de ponernos en marcha.

No es lo mismo realizar una ruta en agosto en el norte de España que en Levante o Andalucía, de forma que en función de la temperatura realizaremos las actividades ecuestres a primera o última hora del día para que el calor no ensombrezca una jornada de diversión.

Ahora es tu turno. Si además de todas estas posibilidades para llevar a cabo una ruta inolvidable junto a tu caballo, conoces alguna otra, ¡no dudes en comentar! 😉