La vida de Patches pendía de un hilo cuando la tecnología ha podido otorgarle una nueva oportunidad. Con un tumor cerebral que incluso había provocado deformidad en su cabeza, la impresión 3D ha podido reconstruir su cráneo y salvar la vida del animal.
Patches se ha convertido en toda una celebridad. Tras pasar posiblemente las horas más duras de sus 9 años de vida, este perro salchicha ha sobrevivido a lo que parecía imposible gracias a la aportación imprescindible de la tecnología. El can, que padecía un tumor cerebral prácticamente incurable que incluso le había deformado la cabeza, ha conseguido salir adelante mediante un pionero y novedoso tratamiento que ha impresionado al mundo.
Un procedimiento nada común que ha consistido, en primer lugar, en extirpar el grave tumor cerebral del animal para posteriormente proceder a reconstruir su cerebro a través de una impresora 3D. Michelle Oblak, cirujana oncóloga veterinaria en el Ontario Veterinary College de la Universidad de Guelph, ha sido la encargada de llevar a cabo la operación, recreando en 3D el cerebro de la mascota canina y creando un mapa del tumor para acabar retirando el mismo de la maqueta. Finalmente, para completar la intervención quirúrgica, Oblak empleó la pieza creada mediante la impresión 3D, y que se ajustaba a la perfección al cráneo del animal.
De esta forma, Patches ha podido sobrevivir milagrosamente y continuar con su vida sin el grave tumor cerebral que estaba limitando su vida de tal forma que incluso ni siquiera podía alzar la cabeza con normalidad y el desmesurado peso del mismo estaba presionando su cráneo de manera preocupante. Con su cerebro reconstruido e implantado gracias a la impresión 3D el cáncer ha desaparecido y Patches ha vuelto a nacer. Una nueva oportunidad gracias a una novedosa y exitosa intervención que ha dado la vuelta al mundo y que puede significar el comienzo de un nuevo método para extirpar tumores de gravedad en perros.
Periodista | Comunicación corporativa y Marketing Digital en TERRÁNEA