El trabajo desinteresado de las protectoras de animales se ve reflejado en historias como la que nos disponemos a relatar. El protagonista de la misma es Mamun, un perro de la raza Pitbull que ha recibido una segunda oportunidad gracias a la intervención del refugio Life4Pitbulls, con el que Terránea colabora con el objetivo de fomentar la adopción de mascotas y evitar el abandono.
Con el firme objetivo de ayudar a visibilizar la labor encomiable que cada día realizan las protectoras de animales, en Terránea ponemos en marcha una iniciativa que consiste en compartir una serie de historias emotivas, interesantes y curiosas que protagonicen los perros que forman o han formado parte de algunas de las protectoras con las que colaboramos de manera solidaria desde hace un tiempo.
Capítulos que podríamos catalogar como finales felices que demuestran el compromiso y el trabajo de estos centros de acogida.
Nuestro primer protagonista es Mamun, un pitbull encontrando en un parque madrileño en un estado de salud deplorable, totalmente desnutrido y muy enfermo de Leishmaniosis. Sin apenas capacidad de movimiento y con los ojos, la piel y en un estado esquelético apenas le quedaban unos minutos de vida.
Por suerte, unos viandantes avisaron a las autoridades y el animal fue recogido y trasladado al CPA de La Fortuna, donde solicitaron ayuda a la protectora de animales Life4Pitbulls para cerciorarse si tenían algún lugar de acogida temporal disponible.
Por suerte, así fue. Ese mismo día Mamun pasó la noche en un hogar de acogida, gracias al que ha recibido desde entonces tratamiento intenso de leishmaniosis, con baños y medicación, que le ha permitido progresar de manera exponencial. De hecho, tras varias revisiones, se encuentra mucho más recuperado, precioso y feliz, como es lógico.
A día de hoy, continúa con su familia temporal perfectamente cuidado y mimado, ganando peso, con la piel en un estado óptimo, y, en definitiva, mucho mejor y más próximo a un estado físico adecuado que en nada se parecía al que tenía cuando fue encontrado.
Una recuperación que le hace estar listo para comenzar su nueva vida en una familia definitiva.
Todo ello gracias al esfuerzo y dedicación de su protectora, Life4Pitbulls, y de su familia de acogida temporal.
Ejemplo claro del buen hacer de estas asociaciones, con las que Terránea mantiene un vínculo especial de colaboración con el fin de ayudar a visibilizar estas acciones y aportar nuestro granito de arena contra el abandono de mascotas.
Periodista | Comunicación corporativa y Marketing Digital en TERRÁNEA